En la era de las comunicaciones, parece que nos sentimos más solos, parece que se nos olvida comunicarnos cara a cara y que no tenemos tiempo para los demás.
Cuando salimos a la calle nuestra mirada está en la pantalla del móvil y no en las personas que nos vamos cruzando.
Pero si te sientes solo o sola puedes alquilar amigos.
Desde 2006, Ryuichi Ichinokawa te alquila parientes, amigos e incluso parejas para que "seas feliz" o, sería más acertado decir, para que parezcas feliz ante los demás.
¿Te sorprende? Pues es un negocio con bastantes clientes en Japón. Puedes alquilar amigos para hacerte fotos y subirlas a las redes sociales, así verán los demás lo feliz que eres y la cantidad de amigos que tienes.
Los principales clientes son personas solteras o de edad avanzada.
Pero aún hay más: "Se alquilan mascotas en Corea del Sur". Sí, se alquilan perros por horas o días con el mismo objetivo: combatir la soledad. Y es que les absorbe tanto el trabajo a los coreanos, que no disponen de tiempo para asumir la responsabilidad de cuidar a una mascota.
No solo ocurre en Japón. En España existen estas empresas de alquiler de amigos desde hace algunos años, porque ¿estamos solos, nos sentimos solos?
En España, en un informe conjunto de la Fundación Axa y Fundación ONCE, en 2014, uno de cada 10 españoles, más de cuatro millones de personas, se sentía solo con mucha frecuencia; en torno al 20% de españoles vive solo, de ese 20% un 41% admite que no lo hace porque quiere sino porque no le queda otro remedio.
Según datos de la Sociedad Española de Médicos de la Residencia (SEMER) de 2017, de ocho millones de personas mayores de 65 años, más de un millón y medio, habrán pasado solos las navidades. Afortunadamente, existen programas sociales para que las personas mayores estén acompañadas, al menos, en esas fechas.
Aunque son las personas mayores a partir de 65 años las que en mayor proporción se sienten solas, también nos encontramos personas de 50, 40, 30 que tras una ruptura, la muerte de la pareja ... se sienten solos, incluso aunque tengan hijos, hermanos, ..., y lo más sorprendente, chicos y chicas universitarios / as, que se mueven en ambientes sociales y se relacionan con personas de su edad, acuden a consulta por el mismo motivo.
Buscan compañía, pero la mayoría no quiere comprometerse, buscan alguien que les preste atención, que los acompañen enganchándose, a veces, en relaciones tortuosas. Tenemos muchos amigos en las redes sociales, pero pocos para compartir un buen o mal momento.
Hace algunos años, la revista Science nos contaba como la escasez de relaciones sociales constituye para las personas un factor de riesgo para la salud, compitiendo con los efectos que provocan otros hábitos y factores como el consumo de tabaco, una presión sanguínea elevada, un aumento de lípidos en sangre, obesidad, la falta de ejercicio ...
Una interesante investigación realizada en esta línea, en Bilbao por la socióloga de la Universidad del País Vasco, María Teresa Bazo [(1991) "Ancianidad y enfermedad", Jano. Medicina y Humanidades, nº 949, 80-87] con una muestra representativa de 412 personas mayores de 64 años, proporcional género y subgrupo de edad de cada uno de los distritos en los que se divide la ciudad, descubriría la variable fundamental para determinar el grado de salud percibida: el sentimiento de soledad. De los resultados obtenidos se desprende que:
Varones y mujeres se sienten en mejor estado de salud cuando no experimentan la soledad
Las personas de menos edad pero solitarias se sienten tan enfermas como las mayores de edad no solitarias
Y cuando los investigadores descubren la importancia de las relaciones sociales para la salud es cuando menos relaciones interpersonales tenemos. Aumentan los singles, se retrasa la natalidad o se decide no tener hijos entre otros cambios en los países industrializados, incrementando el número de ancianos que vive solo y privado de relaciones afectivas en la última etapa de su vida .
Bayés, Limonero y colaboradores, en un trabajo para determinar las condiciones que pueden favorecer una muerte en paz, de once cuestiones, la más valorada fue: " poder percibir cerca, comunicar y estrechar los vínculos afectivos con mis personas queridas" .
Desde que nacemos hasta que morimos buscamos "sentirnos cerca", buscamos que nos quieran. ¿Estamos descuidando esto creyendo que somos autosuficientes y que los que envejecen son los demás?
Quizá podríamos plantearnos otros valores: compromiso, lealtad, acompañamiento, respeto, tolerancia, sensibilidad, compasión, servicio, amor ...
Después de todo esto, es importante apuntar, que la soledad no siempre es contraproducente. La soledad puede ser agradable cuando es elegida. Puedo elegir momentos de soledad para disfrutar de una buena lectura, de un momento de relajación-meditación o de otra actividad que puedas disfrutar en solitario.
Si las relaciones constituyen un papel protector en nuestra salud, cuidemos las relaciones, cuidémonos a nosotros mismos:
· Mantén relaciones sociales que te aporten bienestar
· Sé amable
· Ofrece algo de tu tiempo y "oído" a los demás
· Pide tiempo y "oído" cuando lo necesites, los demás no pueden adivinar
· Sé tolerante
· Respeta y respétate
· Comparte
· Participa de grupos
· Abraza
· Sonríe
· Que las palabras salgan de tu corazón
· Escucha a las personas mayores
· Sigue aprendiendo
· ¿Se te encuentras más más?
FIN. ME VOY A TOMAR UN CAFÉ CON MIS AMIGAS
Referencias:
· SEMER
· Elmundo.es
· Elconfidencial.es
· Psicología del sufrimiento y la muerte. Ramón Bayés. Ed. Martínez Roca